Para poder llevar este proceso de la manera más entretenida y divertida, es necesario una actitud de comprensión y evitar la aparición de ansiedad en el niño/a, de esta manera se sentirá tranquilo y será capaz de controlar los esfínteres.

Para ello, debemos tener en cuenta las características de personalidad, el grado de madurez y la capacidad del niño o la niña para controlar sus esfínteres. Hay que ser paciente, no tener prisa, todo llegá solo requiere tiempo y ayuda.

 

¡Los niños y las niñas son más inteligentes de lo que pensamos! El gran error que la gente comete es suponer que un bebé recién nacido es inconsciente de sus necesidades fisiológicas.